CULTIVANDO SU PERSONALIDAD.- Cuando recien adquirimos la responsabilidad de criar y crear a nuestros pequeños, nos enfrentamos a varias alternativas, entre ellas como medir la fuerza que utilizaré con el o ella para: moldear su carácter, corregir, disciplinar, Etc., hasta donde puedo llegar mostrándole mi amor sin caer en el exceso y me rechaze, o lo debilite con ese amor exagerado, en esta cuestión es dificil mantener el equilibrio entre estas manifestaciones tan disimbolas, por un lado necesitamos analizar como somos y el manejo de nuestras emociones, también esta nuestra pareja y como se desempeña en ese campo, estan nuestros propios pequeños con su personalidad latente Y su entorno y las interrelaciones negativas o positivas que influyen en el.
Aquí es necesario que seamos muy cuidadosos de la actitud que tomemos con ellos pues de esto depende que su ego salga robusto y fortalecido, para lograr el éxito en esta dificil tarea debemos tomar en cuenta lo siguiente: Lo primordial es que haya una buena relación de pareja donde las decisiones se tomen de común acuerdo, en este punto debemos profundizar pues cuando algún integrante de la pareja ejerce la tiranía, la relación sufre un desajuste que puede llevarla a la ruptura y el o los pequeños quedarán muy lastimados; otra situación que debemos tomar en cuenta es cuando somos demasiado sobreprotectores con ellos y tendemos a coartarles la libertad que de otra manera se les va dando gradualmente de acuerdo a su edad y madurez, otra circunstancia es cuando un integrante de la pareja es muy aprensivo y cree que su hijo puede salir lastimado en cualquier momento por lo que sus reacciones son exageradas y vive con la angustia de que su hijo o hija puede estar en peligro y desgraciadamente este miedo es contagioso y puede llegar a enfermar emocionalmente a todos los integrantes de la familia. Por otro lado también se puede dar la siguiente condición, cuando uno de los padres tiene una personalidad tan fuerte y absorvente que tiende a minimizar a los que lo rodean. otra fase más que en este caso sería la contraria, que uno o los dos sean demasiado debiles y permisivos, los niños son demasiado inteligentes como para no darse cuenta de esta situación y aprovecharla para que le satisfagan todos sus gustos por lo que vamos a criar un pequeño voluntarioso, caprichoso y egoista.
Por lo que hemos observado hasta el momento, no hay un patrón de conducta que nos garantice ser el adecuado para resolver todas nuestras dudas pero si nos sirve para ir normando nuestro criterio e identificar cuales serán nuestras actitudes en cada situación...sí nuestras actitudes, ya que por lo observado no nos es posible seguir una sola línea de conducta que proporcione el éxito esperado. Debemos recordar que estamos moldeando una personalidad y no es la nuestra por lo que no podemos hacerlo a nuestra imagen, no es una continuación de nosotros mismos, no podemos ni queremos hacerle eso a nuestros propios hijos puesto que ellos tienes su personalidad propia y a nosotros nos toca reforzarla con acciones que cumplan esa meta, así que ahora que ya tenemos focalizada una imagen de lo que nuestros pequeños esperan de nosotros, podemos entonces continuar con su educación con menos dudas y con mucho amor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario